**Narra
______**
Sonó
el timbre, era lo hora. Salí al pasillo, y comencé a buscar el
aula que Zayn me había dicho ayer. Nunca había estado en ella la
verdad, así que no sabía dónde estaba. La busqué y la busqué.
Por fin, en el fondo de un pasillo por el que poca gente solía pasar
la encontré. Abrí la puerta y vi a Zayn sentado en un taburete.
Toda la clase estaba un tanto desordenada, y no tenía pinta de que
se usara a menudo. Estaba llena de caballetes, pinturas, pinceles,
ceras... Todo sueño de un artista, vamos.
-Guau
-dije al entrar, él estaba concentrado con su móvil y lo sorprendí
-lo siento.
-No
pasa nada -dijo él serio. Siempre lo veía así ¿no sabía lo que
era sonreír? -siéntate ahí -me mandó, señalando un taburete
enfrente del suyo. Yo hice lo que me pidió, y me senté ahí.
-¿Para
qué dijiste que viniera?
-Quédate
ahí quieta -sacó un blog de dibujo enorme, y un maletín con unos
cuantos carboncillos, lapiceros, gomillas, etc.
-¿Qué
vas a hacer? -pregunté extrañada ¿me iba a pintar?
-Te
voy a pintar -me iba a pintar.
-Nunca
me pintaron -dije sonrojada.
-Tu
solo, sonríe.- Hice lo que me pidió, sonreí. Él empezó a mirarme
detenidamente los ojos, y dio unas trazadas. Bajó su mirada a la
zona de la nariz y siguió con otras pocas líneas. Cuando bajó a la
boca, sin querer sonreí un poquito más. Él miró un segundo mis
ojos, y volvió otra vez a la boca, y noté, cuando iba a dar la
trazada correspondiente que sonrió. Si, Zayn sonriendo. No me
preguntéis por qué, para mi es un enigma sin resolver su modo de
pensar. Pero, me había sonreído. Me puse algo nerviosa, a lo mejor
sonrió porque le daba risa o algo, no se. Suelo ser bastante
negativa.- Relájate -dijo él notándolo. Mierda. Comencé
sonrojarme, y él volvió a esconder su sonrisa mientras seguía
trazando líneas.
Suspiró
y volvió a mirarme fijamente. Yo también lo hacía, y comencé a
fijarme en todos sus pequeños detalles que nunca antes había visto.
Su pelo de punta, tapado por el gorro de lana que llevaba hoy puesto,
esos labios. Y sus ojos marrones café, su mirada tan penetrante.
-¿En
qué piensas? -dijo él mientras daba sombra al dibujo, por lo que
podía ver.
-En
nada -contesté rápidamente.
-¿Seguro?
-No
te iba a mentir -contesté yo. Él sonrió ¡Tercera vez que sonríe!
Record mundial, señoras y señores.
Volvió
a haber un silencio, ya me estaba cansando de sonreír, me dolían
las mejillas. Menos mal que al pasar los diez minutos o así de esas
cuatro frases (nunca mejor dicho, habían sido solo cuatro frases) él
soltó el carboncillo que tenía en su mano, y sopló un poco el
papel, para quitar las birutillas sobrantes.
-Ya
puedes descansar -yo suspiré y me relajé de soreír.
-¿Cómo
es que me dibujaste? -pregunté mientras él daba algún retoque.
-Tenía
que hacer un retrato femenino para clase de plástica. Y a mi madre
la tengo ya demasiado pintada -dijo riendo muy levemente, pero para
lo que era él, era todo un logro. Así que yo hice lo mismo y
sonreí.
-¿Podría
verlo?
-Claro
-dijo él, aún sentado en su taburete, y con una tiza blanca en la
mano con la que hacía brillos. Me levanté y me puse detrás suya
para poder verlo, cómo seguía rematando todo, aunque estuviera ya
perfectamente perfecto.
-Es
precioso, ¿esa soy yo? -dije alucinada, ni de coña era yo así de
guapa.
-Así
es como te veo yo por lo menos. -Alzó la vista para poder ver mi
cara, ya que yo estaba de pié y él aún no se había despegado de
su asiento. Sonrió mientras yo miraba perpleja el dibujo. Le di un
abrazo que le pilló bastante por sorpresa.
-Muchas
gracias, es precioso.- Dije yo- fijo que te pone un diez clavado el
profesor o profesora.
-Bueno,
es bastante estricto, no se yo.
-Ya
verás como si. -Me separé del abrazo, y miré mi reloj.-Quedan
quince minutos para que toque el timbre. -Él sonrió y guardó todo
lo que había sacado, excepto el blog, que lo puso encima de lo que
debía de ser su mesa.
-Podemos
marchar ya, si quieres. Pero hay que ir con cuidado, no dejan entrar
aquí cuando no hay un profesor de vigilancia. Y suele haber en este
pasillo constantemente alguno tomando el café.
-Pues
vamos con cuidado.
Cogí
mi bolso, y fuimos hasta la puerta. Zayn, la abrió cuidadosamente.
Yo quedé observándolo embobada.
-Parece
que no hay nadie -dijo con voz baja, mientras miraba cuidadosamente
el pasillo -ven- Caminé entonces hasta donde estaba, y abrimos del
todo la puerta, él salió primero, pero cuando iba a salir yo él
dijo -cuidado, cuidado, está ahí Duncan- dijo casi en susurro y
metiéndose rápidamente en la clase, claro que chocó conmigo, y
caímos ambos al suelo. Estuve a punto de gritar pero él me tapó la
boca. Arrimó con su pié la puerta- no te muevas ni hables -dijo él-
nos arriesgamos a una amonestación- susurró. Gracias a que estaba
arrimada no se nos vio. Yo no me moví, pero él estaba encima mía,
claro, apoyado en sus antebrazos para no aplastarme. Yo asentí con
la cabeza. -Creo que ya no oyen pasos -dijo concentrado en escuchar,
me destapó la boca y quedó un rato mirándome, y yo a él.
Continuará...
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Bueno, aquí está el capítulo dieciséis. A mi personalmente, me encanta. Me encantó escribirlo, incluso lo releí JAJAJAJA. A ver si a vosotras os gusta, comentar ❤
me encanta buen trabajo
ResponderEliminarsiiiiiiguueee porfaaa :) un capi mas hoy :)
ResponderEliminarPD: ME ENCANTOOOOO :)
ResponderEliminarMe encantaaa*---*
ResponderEliminaroooh me juego lo que sea que Zayn se esta enamorandoooo al igual rayitaa :33 porfaaa solo un cap mas ooiiii :33
ResponderEliminarsiiigueeee pliiis el ultimoo capiituulooo dee oiii :))
ResponderEliminarOohh me encantaaa huele a loveee ♥
ResponderEliminarLeii este capitulo y me mori enserio *-* siguientee yaa:)
ResponderEliminarAiiiins, siiigue pliiis:)
ResponderEliminarsiguienteeeeeeeeeeeeeeeeee
ResponderEliminarsigue pleasee
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